Entrevista a Morena González

El año pasado tuve la oportunidad de ver la obra “Sexo sentido” un monólogo protagonizado por Morena González, en el cual, a manera de conferencia, nos lleva a través de una plática a hablar sobre el sexo, la forma en que lo usamos y cómo lo desaprovechamos. Con motivo de la reposición de la obra en este mes y echándonos una fría coca y un helado té, platiqué con Morena sobre “Sexo sentido” y los temas que aborda en el montaje.
 
Fernando de Ita y tú iniciaron con este proyecto hace más de 15 años, a través de una versión de “Tengamos el sexo en paz” de Dario Fo ¿Cómo se da este primer proyecto?
 
En 1998 yo acababa de regresar de España y traía el texto de Fo. Fernando hizo una adaptación al español mexicano y propuso un final diferente a partir de una historia personal mía. El objetivo era llevar teatro a los chavos y hablar sobre el uso responsable de su sexualidad, el uso del condón y sobre las enfermedades venéreas. En esa época no era tan sencillo que una chava se parara frente a ellos a hablarles de sexo o de VIH. Con esa obra tuvimos en su momento apoyo de CONACULTA e hicimos una gira nacional, yo creo que fueron alrededor de 200 funciones.
 
¿Cómo llegaron a Sexo Sentido?
 
Fernando y yo teníamos la idea de retomar el proyecto, pero a mi ya no me interesaba hacer una reposición de lo que hicimos en el ’98. Con la edad que tengo hay otras cosas sobre las que quería hablar y otro público al que me interesa hablarle, como por ejemplo a las “chavarrucas”. Ahora tengo la edad suficiente como para poder hablar de otras cosas y además la experiencia para poder hablar con picardía. En aquel entonces incluso había otro trabajo actoral, un poco más inocente de mi parte.
 
¿Qué consideran, tanto tú como Fernando, que les puede aportar la comedia para hablar de este tema en específico?
 
Fernando en el programa de mano menciona que la comedia es una de las herramientas más fuertes para poder entrar de lleno con el público con un tema que nos puede causar comezón. Sigue habiendo muchas restricciones y diferencias sobre el tema del sexo, lo que sí está claro es que de una otra forma o nos incomoda, o nos da el “jijiji” o no da el pudor. Como no podemos hablar abiertamente de eso, tampoco sabemos si lo estamos viviendo plenamente, a eso nos puede ayudar la comedia.
 

 
¿Has notado cambios en la actitud del público hacia el tema del sexo?
 
En un principio Fernando y yo nos planteábamos si podría ser interesante este texto en esta realidad. Conforme me fui adentrando en la propuesta de Fernando y ensayando el texto, me di cuenta que, aún y con toda la exposición que tenemos al sexo, éste sigue siendo un tabú. Sí he notado cambios, aunque es algo que también tiene que ver con generaciones. Lamentablemente la comunicación ahora nos la dan tan digerida que nos quitan todo poder de creatividad y de fantasía, todo está explícito: las tetas, las nalgas, los video escándalos. Todo está explícito, ya no hay erotismo ni fantasía.
 
¿Crees que esta exposición al sexo nos obligará a ser más humanos?
 
Tendremos que ser más cuidadosos y más inteligentes. Hay tantas herramientas para coger hoy en día, que tenemos que aprender a ser inteligentes. Por ejemplo está Tinder. Me impresiona mucho cómo la gente tiene claro que ahí va a conectar para coger, no hay ningún pudor, no hay ningún problema, hay un acuerdo en común. Lo que se genera en las mentes de ellos antes de llegar a eso, es explosión pura de erotismo.
 
¿El erotismo es algo que ya viene con cada persona o lo vamos aprendiendo?
 
Todo tenemos el erotismo, lo que cambia es la imaginación de cada quien, y cómo la explota. Sería muy bueno que hiciéramos caso a trabajarlo y a practicarlo, siempre buscando estimular la creatividad.
 

 
Fernando de Ita dice en una entrevista para La Jornada que la mujer está más liberada sexualmente, pero el hombre está más restringido, ¿qué opinas de esto?
 
Evidentemente el hombre está más restringido por el rol machista que el hombre tiene sobre la mujer. Bajo esa perspectiva, el hombre considera que no está bien que la mujer ejerza su sexualidad libremente, o que tenga fantasías eróticas. En una mesa los hombres no hablan abiertamente sobre las fantasías que cumple con su mujer, cosa que las mujeres si llegamos a hacer. En Sexo Sentido hay una dinámica donde les pido a los asistentes que escriban sus fantasías. Los hombres que participan y las escribes, aunque normalmente son las típicas, por ejemplo hacerlo con dos mujeres. En cambio, la mujer juega más con sus fantasías, se pone más creativa. Ahí es cuando te das cuenta que la mujer es más liberada, aunque tienen mucho miedo de llevarlas a cabo.
 
¿Consideras que la obra toca temas feministas?
 
Más bien hablo sobre el empoderamiento de la mujer, un tema que me parece importante dentro del punto de vista sexual. Que la mujer esté consciente que tenemos el derecho a ejercer nuestra sexualidad de manera libre, sin pudor, con inteligencia y con responsabilidad, sin ser juzgadas y sin temor a ser juzgadas. En esta puesta en escena quiero hablar con las mujeres para que entendamos que la sexualidad es un acto tan normal como comer o dormir.
 
Hablando ahora sobre el montaje, has presentado el espectáculo en diversos tipos de escenarios, desde lugares íntimos como Carretera 45 hasta espacios más grandes como el Teatro del Estado en Mexicali ¿qué tipo de escenario te gusta más?
 
Los dos me divierten muchísimo. A nivel espectáculo hay una cosa bien interesante con el público. En espacios más grandes normalmente el público no quiere que te vayas porque la gente espera que yo en un momento saque su fantasía y la pueda compartir con ellos.En Abril tendremos la función 40, y no es algo sencillo porque no he tenido una temporada completa como tal, me he presentado temporalmente en diversos espacios. Aún así, en cada espacio ha funcionado muy bien y el formato se ha adaptado a ellos.
 

 
Además, de Fernando, en el proceso de la obra te has acompañado de otras directoras y actrices ¿cómo ha sido el trabajo con ellas?
 
Mayra Vargas y Cristina Alanís me han apoyado en este proyecto. Cristina fue conmigo en la primera parte a Pachuca y luego Mayra ha estado en varias giras. Ha sido muy interesante porque ella al ser mujeres cada que ven el proyecto me aportan cosas, ideas o experiencias de ellas sobre el tema. Es interesante escucharlas porque además es otra generación y me permiten darme cuenta que debemos hablar de la sexualidad de una forma tan natural.
 
¿De qué temas no has hablado en la obra y te gustaría abordarlos?
 
La historia de Lilith, la primer mujer que aparece en la Biblia incluso antes de Eva. Ella fue desterrada por querer ponerse a la par de Adán, y tener sexo estando ella arriba, para poder controlar su orgasmo y sentir placer. Quisiera abordar ese tema, desde el punto de vista del empoderamiento de la mujer, abrirles la mente a las mujeres y que comprendan que es su cuerpo y ellas son responsables del palcer que puedan tener. Eso se da sólo a través del diálogo con el otro y con uno mismo.
 
La obra además de ser didáctica para el público, también es didáctica para quien la está haciendo ¿qué has aprendido del sexo a través de la obra?
 
He aprendido sobre la responsabilidad de ejercer el sexo libremente. ¿Con quién lo voy a hacer? ¿Cómo voy a afectar al otro? Otras cosas que conllevan a la responsabilidad de cómo es la convivencia con los seres humanos. La más importante es la herramienta del erotismo. A través de las funciones y la convivencia con la gente me doy cuenta de la importancia de erotizar constantemente a tu pareja. En la medida en que erotizas al otro, te erotizas a ti.